El mejor observatorio sobre el estado de nuestra profesión se llama “Periodismo 2030. Recetas para una comunicacion digital”. También quiere ser una toma de conciencia de nuestro futuro colectivo, no sólo como profesionales. Una agradable responsabilidad que Fernando Jáuregui, el autor del libro y creador del proyecto, comenta así: “Los periodistas tienen que volar por nuestra cuenta, tienen que ser un auténtico cuarto poder”. Es un viaje, el del periodista vasco, a los confines – todos cambiados, en estos últimos años – de nuetsro trabajo. La comunicación cambia con una velocidad que nos asusta y a la que a menudo no sabemos dar respuestas. Jáuregui está convencido de que “el horizonte 2030 lo definiremos nosotros, profesionales” y advierte que “quieren cargarse el periodismo”.
Lo sabíamos, pero nunca como ahora es importante un trabajo de síntesis y opiniones como es “Periodismo 2030” y un himno al futuro, que sea una profesión basada en la crítica (correcta, pero necesaria), un mensaje que debe ser para todos, según Jáuregui, “muy alto y claro”.
Es un viaje también hacia los jóvenes que quieren emprender este camino y sobre cómo ha cambiado la profesión. “Quien no se actualiza a nivel tecnológico está perdido. Las facultades de Periodismo deben darse cuenta de que deben reciclarse y renovarse muchísimo”. Pero, ¿cómo hacerlo si no se invierte en la formación y el trabajo de los periodistas? “Por otro lado, el periodismo está en una situación crítica económicamente. En algunos sitios se está haciendo periodismo sin redacciones. Algo tiene que ocurrir, algo tiene que cambiar en el sector”.
Jáuregui también cree que el periodismo en papel no está muerto. ” Hay que destacar que la información local es lo que más importa y valoran los ciudadanos y hay mucha prensa de papel regional que ofrece esta información local, muy próxima y cercana”. Y en la prensa española, como ha comentado al periodico “20 minutos”: “Estamos asumiendo un rol poco crítico, si nos busca el poder. Pero claro, no es fácil en estos tiempos de miseria. La repregunta ha dejado de existir y el político se va por las ramas”.
