Todos quieren jugar en el Betis. En Italia hay cola: de Luiz Felipe que parece seguro a Samu Castillejo, que fuentes fiables dicen que quiere jugar en verdiblanco la próxima temporada. También Isco y sabemos por qué: en el Betis se gana y se ganará, como bien sabe Mister Pellegrini que ha ganado aquí, con el equipo que ha crecido minuto per minuto, a diferencia de cuando estaba en el banquillo con Villareal y Madrid. El Ingeniero en la televisión chilena “BioBio” ha lanzado una señal, no se sabe cuán intencional, a Arturo Vidal y Alexis Sánchez que juegan actualmente en el ínter de Milán: “Me gustaría tener al menos uno de ellos porque son dos jugadores muy fuertes, pero sé que no es realista desde el punto de vista económico porque Betis no se puede permitir pagar sus fichajes”.
Es cierto que Betis se ha convertido en un destino muy apreciado por muchos, incluido Isco. Pero el problema con estas voces es que el equipo de Pellegrini solo tiene que, y subrayamos solo, pensar en esta temporada: esta noche tiene una oportunidad más única que rara frente a Getafe. Una eventual victoria, al alcance del once verdiblanco, proyectaría el Betis a un solo punto del Atlético de Madrid. Perfume de Champions. Quique Flores, entrenador del Getafe, sabe bien que se encontrará con un equipo que solo quiere ganar y ha reconocido en declaraciones recientes que hay un Betis antes de Pellegrini y uno después de su llegada a Sevilla. El “nuevo” es implacable y no hace ningún descuento.
